TRAGÉDIA
Maria Olga é uma mulher encantadora. Especialmente a parte que se chama Olga.
Casou-se com um rapaz grande e fornido, um pouco desajeitado, cheio de ideias honoríficas, ordenadas como árvores de passeio.
Mas a parte que ela casou era sua parte chamada Maria. Sua parte Olga permanecia solteira e logo arrumou um amante que vivia em adoração diante de seus olhos.
Ela não podia compreender por que seu marido se enfurecera e reprovara-lhe a infidelidade. Maria era fiel, perfeitamente fiel. O que tinha ele que ver com Olga? Ela não compreendia que ele não compreendesse. Maria cumpria com seu dever, a parte Olga adorava seu amante.
Era culpada de ter um nome composto e das consequências que isto pode trazer?
Assim, quando o marido sacou o revólver, ela abriu os olhos enormes, não assustados e sim cheios de assombro, por não poder entender um gesto tão absurdo.
Mas aconteceu que o marido se equivocou e matou Maria, a parte dele, em lugar de matar a outra. Olga continuou vivendo nos braços de seu amante, e creio que ainda hoje é feliz, muito feliz, sentindo-se apenas um pouco canhota.
tradução: rodrigo madeira
revisão: lu cañete
TRAGEDIA
María Olga es una mujer encantadora. Especialmente la parte que se llama Olga.
Se casó con un mocetón grande y fornido, un poco torpe, lleno de ideas honoríficas, reglamentadas como árboles de paseo.
Pero la parte que ella casó era su parte que se llamaba María. Su parte Olga permanecía soltera y luego tomó un amante que vivía en adoración ante sus ojos.
Ella no podía comprender que su marido se enfureciera y le reprochara infidelidad. María era fiel, perfectamente fiel. ¿Qué tenía él que meterse con Olga? Ella no comprendía que él no comprendiera. María cumplía con su deber, la parte Olga adoraba a su amante.
¿Era ella culpable de tener un nombre doble y de las consecuencias que esto puede traer consigo?
Así, cuando el marido cogió el revólver, ella abrió los ojos enormes, no asustados sino llenos de asombro, por no poder entender un gesto tan absurdo.
Pero sucedió que el marido se equivocó y mató a María, a la parte suya, en vez de matar a la otra. Olga continuó viviendo en brazos de su amante, y creo que aún sigue feliz, muy feliz, sintiendo sólo que es un poco zurda.
Pero la parte que ella casó era su parte que se llamaba María. Su parte Olga permanecía soltera y luego tomó un amante que vivía en adoración ante sus ojos.
Ella no podía comprender que su marido se enfureciera y le reprochara infidelidad. María era fiel, perfectamente fiel. ¿Qué tenía él que meterse con Olga? Ella no comprendía que él no comprendiera. María cumplía con su deber, la parte Olga adoraba a su amante.
¿Era ella culpable de tener un nombre doble y de las consecuencias que esto puede traer consigo?
Así, cuando el marido cogió el revólver, ella abrió los ojos enormes, no asustados sino llenos de asombro, por no poder entender un gesto tan absurdo.
Pero sucedió que el marido se equivocó y mató a María, a la parte suya, en vez de matar a la otra. Olga continuó viviendo en brazos de su amante, y creo que aún sigue feliz, muy feliz, sintiendo sólo que es un poco zurda.
As Marias sempre levam a culpa.
ResponderExcluirhehe.
ResponderExcluirmarias, pobrezinhas, são sacrificadas e beatificadas; olgas gozam infinitamente.
mas a culpa é do desejo. ou melhor, dos desejos... lembremos drummond: "a tarde talvez fosse azul/ não houvesse tantos desejos".